Al entrar en el décimo mes de la pandemia mundial y el comienzo de un nuevo año, he tenido tiempo para reflexionar sobre los grandes desafíos a los que nos hemos enfrentado recientemente en el mundo del trabajo.
Los últimos meses han traído consigo dificultades sin precedentes en todo el mundo. Nos hemos enfrentado a la pérdida de seres queridos, economías con dificultades y cambios drásticos en nuestra forma de vida. A pesar de todo esto, hemos sido testigos de destellos de triunfo en el espíritu humano colectivo. Todos los sectores se han ido adaptando y nos hemos esforzados por evolucionar y encontrar soluciones nueva a los grandes desafíos a los que nos enfrentamos. La más inspiradora de todas ellas es, por supuesto, el desarrollo de la vacuna contra el COVID-19 en tiempo récord.
Aún así, nos queda mucho camino por recorrer. Ahora que muchos en todo el mundo esperan recibir la vacuna, somos testigos de nuevos confinamientos y se ha pedido a los trabajadores que trabajen desde casa. La gente me pregunta con frecuencia qué le depara el futuro a WeWork en estas circunstancias. Si soy sincero, nunca me había sentido tan revitalizado o entusiasmado. La pandemia nos ha enseñado una lección importante sobre el mundo del trabajo. Lo que antes llamábamos «normal» no estaba funcionando, no era una situación óptima ni para los empresarios ni para los empleados. En estos momentos, WeWork tiene ante sí la oportunidad de reimaginar el futuro del trabajo.
De dónde venimos
Hasta hace muy poco, la expansión de los campus y las sedes centralizadas se consideraban sinónimo de éxito. Como la propiedad es el mayor centro de costes para las empresas, aparte de las compensaciones de los empleados, es comprensible que una presencia física significativa se considere el resultado de un modelo de negocio de éxito. Con la llegada del COVID-19, el antiguo status quo no pudo hacer frente al desafío. Esos edificios corporativos con altos niveles de ocupación simplemente no están equipados para respaldar un entorno de trabajo seguro. Así que nos fuimos a casa. Y estos fueron los titulares: «La oficina ha muerto».
El modelo de trabajo desde casa estaba bien, hasta que dejó de estarlo. Trabajar desde casa permitió cambiar el ritmo, creando incluso una oportunidad para que la productividad individual de algunos fuera más eficiente. Pero a lo largo de los muchos meses transcurridos se ha producido un claro cambio cualitativo y cuantitativo en la experiencia. Contar con un espacio de trabajo productivo y dedicado en casa es no solo un privilegio que tienen unos cuantos, sino que incluso aquellos con acceso a ese espacio sagrado también han descubierto sus imperfecciones.
Escribo desde mi propia experiencia. Tengo seis (fantásticos) hijos y cuatro de ellos están ahora en casa. Entre las clases virtuales y el trabajo desde casa, hemos participado en innumerables reuniones virtuales ( English ), clases y actividades. Competimos por el Wi-Fi, así como por disponer de momentos de tranquilidad y concentración. Si bien estamos conectados constantemente, no puedo evitar tener la sensación de que ninguno de nosotros está conectando de verdad. Hay una lista interminable de momentos virtuales programados que tenemos que cumplir que no nos deja tiempo para la reflexión o para hacer el trabajo que tenemos que hacer. He echado de menos disponer de un sitio donde pensar y un espacio donde innovar, en el sentido figurado y literal.
Y sé que no soy el único que se siente así.
La novedad del modelo de trabajo desde casa se ha pasado, y los líderes del sector y empresas de todos los tamaños se enfrentan a desafíos reales. Hemos analizado la situación en WeWork y los empleados también están sufriendo las consecuencias. Nuestro estudio mundial ciego realizado a trabajadores profesionales de oficinas en diferentes sectores reveló que todos los estilos y niveles de trabajo han experimentado impactos negativos en la colaboración y la innovación desde que se instauró el modelo de trabajo desde casa. El noventa por ciento ( English ) de los encuestados desea regresar a la oficina al menos un día por semana. ¿Por qué? Los datos reflejaron, en términos generales, que el trabajo desde casa ha obstaculizado la capacidad para intercambiar ideas y mantener relaciones sociales e interacciones espontáneas, las mismas cosas que inspiran la creatividad y la innovación.
Averiguamos que la cantidad de reuniones virtuales no sustituye a la calidad (o la productividad) que se consigue al pasar tiempo físico juntos. De hecho, según otro estudio, el 36 por ciento se siente menos positivo con respecto a su carrera profesional y el 45 por ciento considera que es menos productivo. Estamos trabajando más que nunca, pero ¿podría decirse que ha sido eficaz?
El modelo de trabajo desde casa puede ser eficaz para algunas personas con funciones o estilos de trabajo específicos. Twitter y Shopify han dado a sus empleados la opción de trabajar en remoto para siempre. La palabra clave aquí es opción. Incluso los gigantes tecnológicos que trabajan con ingenieros que pasan un tiempo significativo trabajando individualmente saben que su personal necesita un cambio. En una encuesta reciente realizada en Google, el 62 por ciento de los empleados comunicó que quería estar en una oficina algunos días, mientras que solo el 10 por ciento indicó que quería trabajar desde casa permanentemente una vez que la pandemia se calmase. Los líderes tecnológicos ya reconocen abiertamente los desafíos. Sundar Pichai, Satya Nadella y Reed Hastings se han pronunciado sobre los aspectos que les preocupan sobre el modelo de trabajo desde casa.
El bienestar mental y físico de nuestros equipos está en peligro. Un estudio de Oracle y Workplace Intelligence en el que se encuestó a 12 000 trabajadores en todo el mundo reveló que el 78 por ciento respondió que la pandemia ha afectado negativamente a su salud mental. En ese mismo estudio, el 85 por ciento dijo que esa mala salud mental asociada al trabajo se traslada a su vida personal en el hogar. En septiembre, una estadística alarmante procedente de un estudio realizado por Lucidspark reveló que 1 de cada 5 trabajadores en remoto sondeados estaba saltándose las políticas de seguridad de sus empresas para reunirse en persona porque consideraban que sus reuniones virtuales eran ineficaces. Eso no está bien. Está en nuestras manos, como líderes empresariales, ofrecer mejores soluciones.
Hacia dónde vamos
Como el mayor proveedor de espacio flexible del mundo, con 800 ubicaciones en 150 ciudades, sabíamos que en estos momentos lo que tocaba era escuchar. Escuchamos a los empleados, a los nuestros y a los de otros sectores. Escuchamos a los líderes de grandes empresas multinacionales, a ávidos fundadores de startups y al resto. En términos generales, había cuatro prioridades claras:
- Los equipos necesitan espacio físico donde estar juntos para realizar un trabajo creativo y colaborativo productivo.
- Los líderes empresariales quieren condiciones flexibles en las propiedades y recelan ante el temor de quedar atrapados en arrendamientos a largo plazo en una economía volátil.
- Los responsables de propiedades y finanzas quieren datos de uso fiables para tomar decisiones de compra, no solo sobre quién está usando los espacios y cuándo, sino con la capacidad de prever espacios que estén más cerca geográficamente de los hogares de los empleados con disponibilidad de aparcamiento y una huella de carbono reducida como resultado.
- La salud y la seguridad ( English ) siguen siendo prioritarias para todas las partes; no solo la seguridad física, sino también el bienestar mental.
Para los líderes, dar respuesta a estas necesidades se ha convertido en un desafío con el modelo de propiedad comercial ( English ) tradicional. En una economía tan vertiginosa como la de hoy, la propiedad es un elemento crítico que hay que interrogar. Si bien un equipo de recursos humanos puede rogar al director ejecutivo que mantenga espacio para la colaboración, el director financiero argumenta en contra de la firma de arrendamientos a largo plazo que comprometen a la empresa en edificios que quizás no se utilicen demasiado. El responsable de propiedad quiere tomar decisiones rentables basadas en datos de uso reales que van más allá del seguimiento de las tarjetas de acceso y tiene en cuenta cómo minimizar de manera eficaz los tiempos de desplazamiento de los empleados y aumentar la accesibilidad.
Hemos empezado a ver tendencias de flexibilización, para los empleados y los empresarios, porque está claro que lo que no hay es una respuesta única. Un estudio de CBRE reciente demostró que para el 86 por ciento de los encuestados, el espacio de trabajo flexible es un componente clave de su estrategia inmobiliaria de cara al futuro. Están surgiendo cuatro enfoques nuevos diferentes que darán forma al futuro del trabajo:
- Trabajar cerca de casa: consiste en proporcionar a los empleados espacios de trabajo profesionales que estén a poca distancia a pie o en bicicleta de sus hogares. Esto prioriza su seguridad al tiempo que se brinda un entorno optimizado para la realización de tareas individuales si el empleado no cuenta con uno en casa.
- Oficinas descentralizadas: un modelo de núcleo y radios que proporciona a los empleados oficinas satélite más cerca de sus hogares. Esto les ayuda a evitar largos desplazamientos, al tiempo que ofrece un espacio para colaborar de manera segura en pequeños grupos. Esto puede dar al personal la sensación de comunidad incluso cuando se encuentran lejos de la sede central.
- Centros de colaboración: un modelo que cambia el propósito de una oficina central para celebrar principalmente actividades colaborativas intencionales, al tiempo que se mantienen políticas de trabajo desde casa para la realización de tareas individuales.
- Espacios de trabajo des-densificados: un modelo que cambia la configuración del espacio de oficina original de una empresa para adaptarlo a las exigencias del distanciamiento social en el mismo espacio físico. Esto quiere decir, por ejemplo, que un espacio en el que antes cabían 1000 personas se ha rediseñado para acoger a 300.
El sector inmobiliario no se diseñó con la flexibilidad en mente. Las condiciones de arrendamiento de ayer no respaldan estas estrategias de espacio emergentes. Según el consejo editorial del Financial Times, «híbrido» será la palabra del año 2021.
En WeWork nos hemos estado reimaginando el propósito de la oficina y cómo se arriendan las oficinas. Somos el único proveedor con la escala necesaria para respaldar estos nuevos enfoques de forma eficaz. (Solo en la ciudad de Nueva York, aproximadamente el 33 por ciento de los trabajadores de oficina vive a 15 minutos de distancia a pie de una ubicación de WeWork y el 58 por ciento vive a 15 minutos de distancia en bicicleta).
Este es un momento crítico de cambios en el sector inmobiliario y sabemos que tenemos las soluciones necesarias para respaldar las estrategias de mañana.
Quiénes somos
En WeWork, creemos que flexibilidad significa contar con espacio de trabajo como un servicio. Somos el único proveedor inmobiliario que ofrece el espacio de trabajo que necesitas, sea cual sea el tamaño, durante el tiempo que lo necesitas, ya sea una hora o años, en cualquier parte del mundo donde lo necesites. Hacemos todo esto sin exigir ninguna inversión inicial y ninguno de los costes añadidos que suelen conllevar el mantenimiento y la gestión de una oficina. Por este motivo, nuestros espacios globales se pueden utilizar para dar cabida con agilidad a todas las estrategias de espacio de trabajo que están surgiendo y ofrecer a los líderes empresariales tranquilidad, sabiendo que pueden evolucionar y ajustar su estrategia siempre que tengan que hacerlo.
Todas las tendencias en torno a los datos y el espacio han generado tres sencillos productos:
- Espacios dedicados: nuestras opciones de espacio de oficina privado de diferentes tamaños van desde espacio para una o dos personas a pisos completos o edificios enteros para miles de empleados. Cualquiera de ellos puede configurarse para uso como espacio de trabajo colaborativo en exclusiva, des-densificado para mantener el distanciamiento social o descentralizado repartido en varios edificios por toda la ciudad, el país o incluso el continente. Debido a nuestra escala mundial, puedes confiar en que los equipos distribuidos siempre disfrutarán de un espacio de calidad consistente dondequiera que se encuentren. Y seguirás teniendo acceso ilimitado a salas comunes y lounges así como a áreas adicionales para realizar actividades de equipo o trabajar manteniendo el distanciamiento social.
- All Access: nuestra opción de suscripción mensual, WeWork All Access, ofrece acceso individual a escritorios y espacios comunes en cientos de ubicaciones en 150 ciudades. Se trata de la solución ideal para líderes que desean ofrecer a las personas distribuidas opciones para trabajar cerca de casa a corto o a largo plazo al tiempo que proporcionan espacios seguros para que los grupos se reúnan siempre que quieran.
- On Demand: nuestra opción de pago por uso, WeWork On Demand ( English ), te permite reservar escritorios y salas de reuniones siempre que quieras y donde quieras, sin compromisos a largo plazo. Esta es la solución ideal para equipos que buscan espacios de colaboración ad hoc y soluciones de trabajo cerca de casa.
Lo mejor de estos productos es que pueden agruparse, combinarse, ampliarse o reducirse cuando lo desees. Nuestros miembros pueden crear fácilmente su propio modelo híbrido y decidir por sí mismos cuál es la mejor opción para su negocio.
Hemos priorizado la salud y la seguridad ( English ) de nuestros empleados y miembros, y nos hemos asociado con empresas de salud y seguridad líderes para redefinir nuestros estándares. Como consecuencia, hemos realizado una inversión de capital significativa en un nuevo sistema de climatización de vanguardia para obtener una calidad del aire óptima, hemos aumentado las medidas de limpieza, hemos instalado 19 000 dispensadores de gel, hemos diseñado cognitivamente señales conductuales para reforzar las medidas de distanciamiento y social, y ahora ofrecemos los kits de toma de muestra para casa para la realización de test de COVID-19 Physician 360TM con descuento (disponibles en algunas ubicaciones). Estamos orgullosos de ser el líder mundial en salud y seguridad en propiedad.
Planifica hoy para mañana
La realidad es que ahora es cuando hay que actuar. Incluso con la promesa de la vacuna, no podemos saber con certeza cuándo finalizará la amenaza del COVID-19, pero sabemos que planificar para el futuro del trabajo ( English ) es crucial para la reconstrucción de nuestra economía mundial y para la salud de nuestros equipos. Esa planificación tiene que comenzar ahora.
El cuarenta por ciento de las empresas de la lista Fortune 100 son miembros de WeWork y muchos de ellos están trabajando en estos momentos con nosotros para reconfigurar sus espacios de trabajo para las estrategias inmobiliarias del futuro. Están pensando intencionadamente en cómo usar el espacio, dónde y cuándo lo quieren. Ofrecen a sus empleados comodidad priorizando su seguridad y escuchando y respondiendo a sus necesidades únicas. Están usando nuestra tecnología para hacer una previsión de ubicaciones optimizadas geográficamente para reducir los trayectos al trabajo. Están reimaginando la función de la oficina y planificando soluciones híbridas de espacios compartidos, descentralizados y dedicados para ofrecer a sus equipos máxima flexibilidad, reducir sus gastos fijos y proporcionar una experiencia impecable en todo el mundo.
Así que cuando la gente me pregunta cómo me siento acerca del futuro del trabajo y yo respondo con entusiasmo, se debe a que la oportunidad que tenemos ante nosotros realmente me inspira. Aquellos que creen que volveremos a la situación en la que estábamos antes de la llegada del COVID-19, cerrarán sus puertas. Tal y como un analista de The New York Times escribió recientemente, «El coronavirus no matará la oficina. En cualquier caso, esta será más dinámica que nunca. La capacidad de trabajar de forma remota no alejará a la mayoría de las personas de las ciudades y oficinas, pero permitirá que muchas personas vivan y trabajen de manera diferente y en lugares nuevos».
Si tomamos este momento como un periodo durante el cual reinventar el espacio de trabajo para que sea más seguro, productivo y colaborativo, las posibilidades de lo que podemos lograr llegarán más allá de las paredes de cualquier oficina.
Marcelo Clauré es presidente ejecutivo de WeWork y director ejecutivo en SoftBank Group International.