Casi un año después del comienzo de la pandemia, trabajar desde casa puede haber perdido la gracia para algunos. Si bien el trabajo remoto proporcionó una solución para millones de personas durante la crisis de la COVID-19, los meses que pasamos intentando ser productivos aislados de nuestros compañeros de trabajo, pero apiñados con los demás miembros de la familia, ahora tienen sus efectos.
Para comenzar, aquellos que no tienen el privilegio de tener una oficina en casa carecen de espacio físico. Una encuesta de Hinge Health demostró que solo un tercio de las personas cuenta con un espacio de oficina exclusivo en una sala separada. Si bien la mayoría de los encuestados tenía un escritorio, muchos afirmaron haber trabajado desde la mesa del comedor o desde el sofá.
Otra encuesta arrojó que el 59 % de los trabajadores dicen que el mayor desafío fueron las distracciones del hogar. Esto no es novedad, ya que muchos viven con parejas, compañeros de casa o niños que también asisten a clase desde casa, lo que hace que sea virtualmente imposible trabajar sin interrupciones. Y si bien las reuniones por Zoom son útiles, no tener contacto en persona limita las oportunidades de colaboración y los debates creativos espontáneos.
De acuerdo con un estudio ciego llevado a cabo por WeWork y brightspot strategy, los que regresaban a la oficina cuatro o cinco días a la semana informaron un aumento de la moral del 54 % en comparación con los que trabajaban desde casa. Y en otro estudio, el consenso fue claro: la gran mayoría (el 90 %) de las personas afirman que quieren volver a la oficina al menos un día a la semana, y el 20 % de ese grupo quiere regresar los cinco días completos. Lo mismo sucede con los estudiantes universitarios y de posgrado. Los estudiantes que asistieron a la universidad de forma presencial en otoño de 2020 mostraron el doble de satisfacción que aquellos que cursaron en línea, según un estudio de WeWork y brightspot strategy. En resumen, trabajar desde casa no es para todos.
Tener acceso a un espacio de oficina dedicado puede ofrecer soluciones para empresas, empleados y estudiantes que buscan un lugar donde puedan hacer su trabajo sin distracciones. Gracias a las oficinas privadas pequeñas y las áreas tranquilas, sin mencionar el servicio confiable de wifi y la tecnología, las ubicaciones de WeWork ofrecen un escape ideal para los empleados y estudiantes agotados del trabajo desde casa.
Ahora todos pueden trabajar fácilmente desde una ubicación de WeWork con WeWork On Demand, para uso por día, o con WeWork All Access, una membresía mensual que te permite trabajar desde cientos de edificios en todo el mundo. En estos espacios, encontrarás diversos lugares diseñados para fomentar la concentración. Estos son algunos de ellos.
Un espacio de trabajo/sala de estar ideal
Si estuviste trabajando desde tu sofá, es probable que el entorno no luzca tan sereno como el de WeWork 320 Pitt S, en Sídney. Esta zona acogedora ofrece el lugar perfecto para tener una breve conversación con un colega o para cuando necesitas alejarte del escritorio unos minutos y relajarte.
Oficina con vista
Si la vista de tu «oficina» en casa el último año eran pilas de ropa para lavar en tu habitación o canastos de juguetes en un sótano en penumbras, este espacio junto a la ventana en WeWork 33 Arch St, en Boston, te encantará. Tener un rincón para despejar la mente unos minutos sin interrupción puede representar una mayor concentración el resto de la jornada laboral.
Jornada laboral zen
Sin desorden, sin niños luchando con la conexión a su clase virtual, sin una pareja hablando por el altavoz: solo un espacio tranquilo, cómodo y silencioso para concentrarte en WeWork Kamiyacho Trust Tower, en Tokio.
Descansos sin tareas del hogar
Una buena luz natural y asientos de sala de estar, como en WeWork Gotham Center en Long Island City, Nueva York, son un buen punto de partida si estuviste todo este tiempo incómodo trabajando desde la mesa de la cocina. Cuando la mente necesita un descanso, lavar la vajilla no cuenta, pero un espacio como este para despejarte puede ayudarte a sentir energía renovada.
Usa las cabinas (¡no el baño!)
Para todo aquel que alguna vez se refugió en la habitación, el baño o el armario para tener una llamada importante con un cliente o para grabar un podcast, estas cabinas insonorizadas en WeWork 1 Shankar St, en Herzliya, Israel, serán una opción mucho más adecuada. Las cabinas ofrecen privacidad y evitan el ruido de fondo, y no hace falta maniobrar el teléfono con las manos.
Silencio sideral
Esta sala de relajación en Londres, en WeWork 10 York Rd, que nos recuerda a una visita al planetario, está diseñada para inspirar. Piensa en el contraste entre este espacio silencioso y el caos de la clase de gimnasia de tus hijos o de tu compañero de casa.
Del sofá a la oficina de la esquina
Si estuviste trabajando en un espacio pequeño de tu casa, es probable que quieras sentir las vibras de WeWork Prolongación Paseo de La Reforma 1025 en la Ciudad de México. Los ventanales hasta el techo, las sillas ergonómicas y los escritorios de madera natural son propicios para realizar un trabajo más orientado a los detalles.
Colúmpiate hacia la productividad
Si tan solo pudieras aplicar el toque tropical de WeWork 85 Broad St, Nueva York, en tu oficina improvisada en la sala de estar. Los columpios de mimbre y la abundancia de verde fomentan la calma y la relajación para que puedas completar esa tarea tan compleja.
Trabaja en silencio, sin auriculares
Las fabulosas olas de colores, un sillón de pana y una otomana en WeWork Avenida de las Américas 1254, en Guadalajara, México, te ofrecen un rincón tranquilo para que te pongas cómodo y termines de revisar tu proyecto. Es lo opuesto a escuchar el televisor y las consolas de juego a todo volumen que tanto interfirieron en tus tardes de trabajo desde marzo del año pasado.
Trabaja desde un paraíso
Podrás encontrar todo lo que imaginaste de una oficina privada en WeWork 2 Belvedere Dr, en Mill Valley, California. Una zona amplia y ordenada de escritorios, colores neutros que dan sensación de mayor espacio y luz natural, y ningún proyecto de ciencias a la vista.
Contemplación e innovación
¿Cuándo fue la última vez que te reuniste con un compañero de trabajo para escuchar sus comentarios sobre una idea y que no tuviste que silenciar tu micrófono por los murmullos de fondo? WeWork Purpurina 400 en São Paulo, Brasil, presenta una sala de descanso acogedora, colorida y perfecta para la colaboración contemplativa.
Dawn Papandrea es una escritora independiente que se enfoca en relacionales laborales, finanzas personales y educación superior. Sus escritos han aparecido en numerosas publicaciones, como US News & World Report y Monster.com. Síguela en Twitter.